Para poder dar respuesta a esta pregunta se necesita comprender cómo funciona esta modalidad de estudios. El estudio en línea incorpora
el uso de las Tecnologías de la Informática y la Comunicación, las cuales forman parte de la transformación social cultural e histórica de la humanidad.
En la actualidad, son estas tecnologías las que permiten el intercambio de la información a velocidad luz entre un punto del planeta y otro, y es en este hecho en el que se basa el estudio en línea. Para ello se necesita un entorno o aula virtual donde se llevará a cabo dicho estudio, el cual está diseñado para permitir el flujo de información entre los participantes.
El estudiante en línea se distingue porque tiene una actitud de ir al frente, y a no esperar a que sucedan
las cosas o que el profesor le indique lo que tiene que hacer. En comparación con un estudiante presencial, el estudiante en línea presenta mayor dinamismo y participación, impulsado por el fácil flujo de la interacción. El estudiante en línea no se encuentra sujeto a los horarios y a los espacios físicos para dar paso a la
autogestión; esto implica que el mismo es quien determina donde, como, cuando, y cuanto estudia, lo
que le da al estudiante el papel protagónico dentro de su proceso de aprendizaje.
Sumado a esto, la plataforma de foro que ofrecen las aulas virtuales, permiten también la interacción entre los estudiantes, agilizando así la resolución de dudas y el intercambio de conocimiento.
Además de las características anteriores, el estudiante en línea debe desarrollar competencias interpersonales. Éstas constituyen herramientas básicas para el desarrollo humano. En la medida
que el estudiante en línea desarrolle y potencie las habilidades tanto académicas como interpersonales
descritas en los apartados anteriores, el estudiante podrá en paralelo superar retos propios a su vida
académica.
El ser un estudiante en línea implica ciertos saberes, actitudes, retos,
exigencias, ventajas y compromisos, pero sobre todo la disposición de aprender, la educación en línea no
tiene porque concebirse como fácil o difícil, el estudiante en línea tiene ante sí la oportunidad de marcar su
propio ritmo de aprendizaje y de trazar sus horizontes de estudio de acuerdo con sus metas académicas.